No podemos callar nuestro entusiasmo ante este histórico hecho, establecido por Dios como paso previo para llevar a la conversión del inmenso país. Una Rusia convertida influirá en la historia de modo imprevisible. Y pues han circulado diversas objeciones, nos proponemos contestar seis de ellas.
Un gobernante demoníaco es flanqueado por la Avaricia y la Vanagloria. Sobre él, una alegoría con cuernos lleva una espada y la balanza de la Justicia... pero sin platillos (Detalle de la Alegoría del Mal Gobierno).
Se suceden, uno tras otro, escándalos que involucran a autoridades de todo nivel. Se proponen sanciones y soluciones, unas más drásticas que otras, pero ninguna será suficiente porque omiten el problema de fondo: el haber apartado la Ley de Dios de la vida privada y pública. Para reflexionar sobre ello, permanecen actuales los siguientes comentarios, vertidos por el Prof. Plinio Corrêa de Oliveira en 1993.